El placer resulta ser el fin supremo de la vida y por tanto orientarán toda su existencia a la búsqueda del placer y la destrucción al dolor.
A su muy corta edad Ryan McGinley se ha convertido en uno de los fotógrafos más exitosos y omnipresentes en el mundo, se atrevió a capturar imágenes con un cierto descaro y polémica para la mayoría de las personas que las observaban.
Nació el 17 de octubre de 1977 en Ramsey, New Jersey. Estudió Diseño Gráfico en la Escuela Parsons y actualmente vive en Nueva York.
El desnudo pasó a ser una constante en la mayoría de su trabajo, utilizando varias técnicas como desenfoques, barridos y aberraciones cromáticas, estas no afectaban el discurso de la imagen, por el contrario, le daban un toque más interesante a las fotografías.
McGinley representa una generación de fotógrafos que se dedicaron a retratar sin presunciones vivencias de la nueva juventud principalmente la homesexualidad y los excesos, temas que otros artistas preferían ocultar.Su estilo personal, ligado a la extrema honestidad, tono alegre y una exploración del desnudo, lo impulsó como un artista fundamental para entender la fotografía contemporánea.
En 1999 envió a 100 editores y artistas que admiraba, un libro de 50 páginas con sus fotos. El libro se titulaba «The Kids Are Alright» (Los chicos están bien) y consistía en fotos exuberantes, atrevidas y que desprendían placer, sus principales modelos eran sus sus amigos de Nueva York.
Los patinadores, músicos, artistas del graffiti y los gays son los principales trabajos de McGinley.
La gente se enamora con el trabajo de Ryan ya que cuenta historias sobre la liberación, preferencias sexuales y principalmente de placer temas poco seleccionados por otros fotógrafos.
A los 26 años se convirtió en el artista más joven en tener una exposición individual en el Museo Whitney de Nueva York.
Sus fotografías se han expuesto en galerías y museos:
* Exposiciones individuales en el MoMA PS1 en Nueva York
* En el MUSAC de León en España
*El San Francisco Museum of Modern Art y el El Museo Whitney de Arte Americano en Nueva York.
*Fue a un viaje de dos años a decenas de conciertos de Morrissey en los Estados Unidos, el Reino Unido y México.
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